Lo que siento por ti,
me inquieta, me agobia;
me envuelve fuertemente hacia las rutas de la inquietud
donde preguntarse quien es uno mismo no es una cosa razonable…

Se desgastan mis ilusiones con el paso de tus ataques;
cuando hieres mi corazón,
me envuelvo en cosas grises,
sórdidas que me hacen girar muy rápido por todos lados…

No temas perderme, estás en mis pensamientos;
yo solo quiero envolverme
de fisuras que me hagan mirar lejos.

Lo que siento por ti,
es un espiral que me encierra en tus brazos
y me aplasta de ti.

Negro, blanco, déjame tocarte, quererte, cuestionarte;
pero no me pidas que cambie;
así mis besos no podrán confundirte con nada más.